Fotos: Seminario Mayor San José de Cúcuta
El domingo 8 de mayo se celebró la quincuagésima novena Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones, bajo el lema: “Llamados a edificar la familia humana”, propuesta del Papa Francisco para “reflexionar sobre el amplio significado de la “vocación”, en el contexto de una Iglesia sinodal que se pone a la escucha de Dios y del mundo”.
En el marco de esta celebración, la Diócesis de Cúcuta dio apertura a la Semana Vocacional 2022: “Jesús es mi Pastor, ¡sigamos adelante!”, cuya agenda desarrolló la comisión diocesana de pastoral vocacional.
Del 8 al 14 de mayo, la comisión anima a todas las vocaciones a seguir adelante, fortaleciendo el espíritu misionero, asimismo invitando a los jóvenes a descubrir el llamado que el Señor le hace a cada uno. Con visitas a las comunidades parroquiales y “toma a los colegios”, los seminaristas del Seminario Mayor San José de Cúcuta, guiados por el presbítero Héctor David Molina Cárdenas, estuvieron anunciando a Jesucristo y compartiendo su experiencia de formación al sacerdocio con cientos de jóvenes de Cúcuta y el área metropolitana.
Comprendiendo que las vocaciones no son solo religiosas y que el Señor llama a cada quien por su nombre (Cf. Is 43, 1) para que lleven la alegría del Evangelio (Cf. Rom 10, 15) en medio de todas las realidades, los seminaristas estuvieron suscitando en los estudiantes, la curiosidad por “salir de la zona de confort” y asumir que la juventud “está llamada para cosas grandes y maravillosas, como futuro de la Iglesia y la vida en sociedad”, así lo expreso el seminarista Víctor Alfonso Noriega Portillo, desde el colegio Municipal María Concepción Loperena, el día miércoles 11 de mayo, donde junto al seminarista Brayan Camilo Muñoz Ordóñez, realizaron la visita a los estudiantes de décimo y once grado, a quienes animaron a construir su proyecto de vida, para responder a la misión que el Señor les ha encomendado.
Por su parte, los seminaristas Johan Camilo Bernal Paba y Cristian Ibarra Ropero, invitaron a los estudiantes de las instituciones educativas Cristo Obrero y Buenos Aires (barrio La Ermita) a preguntarse: “¿cómo me veo en unos años?”, para poder responder al llamado de Dios, y desde la vocación que tomen, puedan evangelizar y extender el Reino de Dios por toda la tierra, desde su vocación personal, porque “evangelizar es conocer, amar y servir a los demás”, aseguró Ibarra.