“Técnicamente, no es que no sea posible reconstruir el templo que está acá. Es posible reforzarlo estructuralmente pero cualquier cosa que hagamos en ese templo va estar abocada a desaparecer, conociendo esta situación, una intervención, sería detrimento patrimonial. Restaurar algo en un sitio cuya falla geológica está activa no es posible”, precisó la Viceministra.
López manifestó: “nosotros pensamos desde el Ministerio de Cultura que si bien el templo es un referente de memoria colectiva no podemos reconstruir ni intervenir el que está aquí, tenemos que ingeniarnos, ser creativos proponer algo más que haga el link, el paso comunicante entre el que lo que pasó y lo que se haga en el nuevo casco urbano”.
Gramaloteros reiteran llamado a reconstrucción del templo en el nuevo casco urbano
En desarrollo de la visita, también la Iglesia Católica de Cúcuta y los gramaloteros reiteraron el llamado a apoyar la reconstrucción del templo.
Mons. Julio César Vidal Ortiz, obispo de Cúcuta, se refirió a la importancia de la celeridad y respuesta oportuna en el acompañamiento de la población gramalotera y en el proceso de reconstrucción del casco urbano, e insistió en el pedido al Gobierno Nacional a apoyar la reconstrucción del templo, “principio de cohesión de los gramaloteros (…) Infraestructura que obtuvo el mayor puntaje, al ser consultado los gramaloteros sobre las construcciones que deseaban se tuvieran en cuenta en el nuevo casco urbano; pero que no fueron contempladas dentro del proceso de reconstrucción proyectado”.
El prelado, señalando que si bien la normatividad limita la destinación directa de recursos, la propuesta de la Iglesia Católica de Cúcuta es “hacer un esfuerzo común por devolverle a su gente (los gramaloteros) su alma, porque así se construya un pueblo muy bonito, sin la parroquia, corazón del gramalotero, se sentirá un vacío existencial (…) Proponemos un fondo común donde todos apoyemos en la gestión.
Por su parte, la alcaldesa de Gramalote, Sonia Rodríguez advirtió que “si no resolvemos el tema de la parroquia, esto se podría convertir en una talanquera para el retorno de la población, que es un proceso bastante complejo a nivel social”.