En un contexto de oración el prelado hizo énfasis en dos aspectos fundamentales durante el Tiempo de Adviento: el misterio de la Encarnación y de la Redención humana. “Es un tiempo que nos debe ayudar a superar los obstáculos que nos separan de Dios, es un tiempo para escuchar la Palabra de Dios, para revisar con esperanza y fe nuestra vida”, puntualizó.
Monseñor también destacó que en Adviento se reconocen las capacidades y limitaciones del hombre para responder a Dios, razón por la cual se hace necesaria la ayuda de Él durante este camino que es un signo concreto de esperanza, de silencio, para escuchar a Dios y entenderlo hecho hombre.
El Clero Diocesano se reunió desde las 8 de la mañana en la capilla del Seminario para discernir los pasos que se deben vivir durante estos 26 días de preparación al nacimiento del Salvador.