Fotos: Centro de Comunicaciones Diócesis de Cúcuta
“En este momento terrible de la historia, Dios no nos abandona”, aseguró Monseñor Víctor Manuel Ochoa Cadavid, Obispo de la Diócesis de Cúcuta, durante la meditación en la noche del Sábado Santo.
La Solemne Vigilia Pascual se llevó a cabo en la Catedral San José y fue transmitida, como todas las celebraciones en este tiempo de confinamiento. Desde allí, el Obispo, un par de sacerdotes, diáconos y seminaristas, participaron de la celebración litúrgica.
La Diócesis de Cúcuta invitó previamente a los fieles, a preparar un altar en sus hogares, que incluyera un crucifijo, un cirio y agua, para que al unirse a la transmisión, también con fe recibieran la bendición del fuego y el agua.
Durante la liturgia bautismal, Monseñor explicó en esa noche “renacemos todos por el Santo Bautizo, el sacramento del encuentro con Dios, de la vida eterna”. Explica que es un momento donde Dios reconstruye a la Iglesia y da nueva vida a los hombres. Precisamente, llevando a contexto el momento que vive el mundo, una pandemia que aisló la humanidad, pero que, “Dios nos reúne, Dios nos acompaña”.
Monseñor Víctor Manuel invita a todos los cristianos a abrir el corazón al amor de Dios y a fortalecer la esperanza de que Él “nos salvará”.
Con la Solemne Vigilia Pascual concluyó el Triduo Pascual y se celebró la víspera de la Resurrección de Jesucristo.