En la ponencia “desafíos de la Pastoral Social” el prelado, haciendo referencia a un proceso de construcción de paz, insistió que se debe pensar en un camino enfocado a soluciones de fondo para generar cambios en una época contemporánea. Precisó que “la Iglesia Católica debe adquirir y fortalecer más el rostro solidario”, identificarse como una Iglesia con una gran capacidad de reconciliación y comunidad”.
Retomando un fragmento de la exhortación apostólica Evangelii Gaudium, escrita del Papa Francisco, Mons. Henao habló de la importancia de ir a las periferias de distinto orden, donde la gente se siente excluida, no acogida; una reflexión del envío, de salir al encuentro con el otro y como discípulos misioneros vivir y transmitir la alegría del Evangelio en las comunidades.
Dentro de los grandes desafíos que identificó en torno a la importante labor que realiza la Pastoral Social, destacó el ahondar en el trabajo por el bien común “y de ser capaces de demostrar que realmente se está trabajando, donde se sientan representadas las distintas tendencias de una sociedad”. (…) “Toda la Pastoral Social se tiene que fundamentar en la palabra de Dios para que sea realmente pastoral, para que sirva al plan de Dios”. Precisó el obispo.