De izq. a der.: Pbro. Jesús Uriel Cristancho Torres; pbro. Yessid Rubio; diácono Samuel García; Mons. Óscar Urbina; Mons. José Libardo Garcés; diácono Jorge Higuera; pbro. Yhon Canedo; pbro Daniel Carreño; y pbro. Juan Carlos Lemus Torres. Fotos: Centro de Comunicaciones de la Diócesis de Cúcuta
Con la Sagrada Eucaristía, celebrada en la Catedral San José, se llevaron a cabo las ordenaciones diaconales y presbiterales, por imposición de manos y oración consecratoria del Obispo de la Diócesis de Cúcuta, Monseñor José Libardo Garcés Monsalve. Los nuevos diáconos ordenados el sábado 26 de noviembre son: Samuel Darío García Gómez y Jorge Enrique Higuera Guerrero; y los neopresbíteros: Yessid Fernando Rubio Rolón, Daniel Argenis Carreño Fuentes y Yhon Pablo Canedo Archila.
Candidatos para el diaconado: Jorge Higuera y Samuel García
El señor Obispo describió al diácono como un servidor a ejemplo de Cristo, y afirmó que los sacerdotes y Obispos, siguen siendo diáconos, porque no pierden el don del servicio.
Candidatos para el presbiterado: Yessid Rubio, Daniel Carreño y Yhon Canedo
A los nuevos presbíteros, Monseñor les aseguró que fueron elegidos por Jesucristo, para que sean presencia y acción viva en la Iglesia. Los invitó a que sean siempre discípulos, fieles y leales, porque lo manifestado en esta ordenación “no puede ser un “sí” circunstancial y emocional, el “sí” de hoy es para la vida, es un compromiso para caminar en gracia, oración, disciplina y mística sacerdotal, con fervor apostólico y en salida misionera», afirmó el Obispo.
A través de las redes sociales de la Diócesis de Cúcuta y la Emisora Vox Dei en el dial 1.120 A.M., fue transmitida la Santa Misa, que fue concelebrada por Monseñor Óscar Urbina Ortega, Arzobispo emérito de Villavicencio, con la compañía de los sacerdotes, religiosos, seminaristas, fieles bautizados y familiares de los candidatos.
Oración consecratoria
Monseñor José Libardo, pide atentamente a los fieles, encomendar en sus oraciones a los nuevos diáconos y presbíteros, para que el Espíritu Santo los guíe y la Santísima Virgen María, junto a su esposo, san José, los acompañe.