«En ustedes, niños, todo habla de vida, de futuro. Y la Iglesia, que es madre, los acoge, los acompaña con ternura y con esperanza”, expresó el Papa Francisco, el pasado 25 de mayo, ante unos 50.000 niños reunidos en el Estadio Olímpico de Roma, durante el encuentro de la Jornada Mundial de los Niños.
La primera «Jornada Mundial de los Niños» (JMN 2024), organizada por el Dicasterio para la Cultura y la Educación, se celebró en Roma el pasado 25 y 26 de mayo. A su llegada al Estadio Olímpico, el Papa Francisco fue recibido por los organizadores del evento y por 5 niños representantes de los 5 continentes, quienes le saludaron en sus respectivos idiomas.
El Santo Padre pronunció un discurso de bienvenida: “¡Queridos niños y niñas! ¡Ya está! ¡Ya está aquí! La aventura del JMN, Jornada Mundial de los Niños, ha comenzado. Nos hemos reunido aquí, en el Estadio Olímpico, para dar el ‘saque inicial’ a un movimiento de niñas y niños que quieren construir un mundo de paz, donde todos seamos hermanos y hermanas, un mundo que tenga futuro, porque queremos cuidar el medio ambiente que nos rodea”. Posteriormente, se presentaron testimonios y reflexiones.
El Papa recordó que el pasado 6 de noviembre los había recibido en el Vaticano y mencionó que cada uno de ellos trajo una alegría incomparable para su vida y ministerio. Además, el Pontífice expresó y recordó que aquel día los pequeños le hicieron una serie de preguntas sobre el futuro de la humanidad y el mundo. “Aquel encuentro dejó una huella en mi corazón y me di cuenta de que aquella conversación con ustedes tenía que continuar, tenía que extenderse a tantos otros niños y jóvenes. Y por eso estamos hoy aquí: para continuar el diálogo, para plantearnos mutuamente preguntas y respuestas”, mencionó.
El encuentro de la Jornada Mundial de los Niños se desarrolló entre cantos, testimonios y preguntas que los niños hicieron al Papa Francisco, a las cuales él respondía, siempre invitándolos a rezar por los niños que sufren: “¿Cómo es que algunas personas no tienen ni casa ni trabajo?”, preguntó un niño de Nicaragua. A lo que el Papa Francisco respondió: «Es fruto de la maldad, el egoísmo y la guerra» … «tantos países gastan dinero en fabricar armas y hay gente que no tiene qué comer». El Papa también los invitó: «Todos los días, recen por los niños que sufren esta injusticia».
El pasado domingo 26 de mayo, el Papa Francisco celebró la Misa de la Solemnidad de la Santísima Trinidad en la Plaza de San Pedro, concluyendo así la primera Jornada Mundial de los Niños. Además, mencionó en esta gran primera JMN un sentimiento que notó en los niños: “Están tristes porque muchos de sus compañeros no pueden ir a la escuela. Hay niñas y niños que no pueden ir a la escuela. Son realidades que yo también llevo en el corazón, y rezo por ellos. Rezamos por los niños que no pueden ir a la escuela, por los niños que sufren guerras, por los niños que no tienen comida, por los niños que están enfermos y nadie cuida de ellos”.