En la reunión, llevada a cabo durante tres días y convocada por la Conferencia Episcopal de Colombia, los obispos socializaron el conflicto que se vive el país y que, en gran medida, no logra ser conocido suficientemente por todos los colombianos.
La jornada buscó «diseñar estrategias para una pastoral de reconciliación y paz que permitan la humanización del conflicto», logrando de esta manera seleccionar principios, categorías y líneas de acción que muestren la ruta a seguir de la Iglesia Católica Colombiana.
Con estas directrices establecidas, según información dada por la CEC, será posible que la Iglesia Católica asuma un compromiso más de fondo con relación a un post-conflicto que se considera delicado e importante para la consecución de una paz duradera.
Con información y foto de la CEC