Fotos: Centro de Comunicaciones Diócesis de Cúcuta
Gracias a la Campaña de Comunicación Cristiana de Bienes que se realizó durante el mes de marzo del presente año, en el tiempo de Cuaresma, los fieles bautizados de la Diócesis de Cúcuta, en un ejercicio de abstinencia, pero también de caridad y ofrenda, han contribuido para llevar a tres mil familias una solución de alimento; específicamente a las familias del Anillo Vial Occidental.
La primera entrega, con más de cuarenta mercados, se realizó a las familias de colombianos retornados y venezolanos migrantes, que se forman en el proyecto Las Delicias de ‘La Niña María’, de la Fundación Pía Autónoma Asilo Andresen, el pasado 6 de agosto.
Gracias a la generosidad de tantas personas, se lograron constituir, con los recursos económicos de la Campaña, tres mil mercados, que se seguirán distribuyendo a las familias más vulnerables del Anillo Vial Occidental de San José de Cúcuta.
La segunda entrega de mercados, tuvo lugar en los sectores de La Fortaleza y La Primavera, pertenecientes a las parroquias Santo Tomás Apóstol y San Alberto Hurtado, respectivamente. El día viernes 20 de agosto, con la compañía de Monseñor José Libardo Garcés Monsalve, Administrador Apostólico de la Diócesis de Cúcuta; los sacerdotes Leonardo Mendoza Gélvez, párroco de Santo Tomás Apóstol; Ovidio Peñaranda, párroco de San Alberto Hurtado; y Jaime Enrique Aparicio Rubio, director de la Fundación Banco Diocesano de Alimentos, se entregaron más de cien mercados (de quinientos que se entregarán en estos sectores), y que servirán para apoyar a las familias que, seleccionadas entre estas comunidades, no cuentan con los recursos necesarios para suplir esta necesidad básica.
Con la bendición de los mercados por parte de Monseñor José Libardo y una invitación a dar gracias a Dios por tantas personas generosas en esta Iglesia Particular, se realizó esta entrega a través de la logística de la Fundación Banco de Alimentos de la Diócesis de Cúcuta.
De izq. a der.: Pbro. Jaime Aparicio, director de la Fundación Banco Diocesano de Alimentos y pbro. Leonardo Mendoza, párroco de Santo Tomás Apóstol
El padre Jaime Aparicio afirma que este es un momento para compartir la alegría y demostrar el rostro de Cristo a través de la caridad, ya que, en nombre de todos los bautizados de esta Iglesia que peregrina en Cúcuta, se realizan estas acciones que llevan esperanza a muchas familias afectadas por la situación económica de esta zona de frontera y también por la crisis que deja la pandemia de la COVID-19.
El fruto de esta ayuda, es reflejo de la caridad de Cristo, como lo afirma el padre Leonardo Mendoza, quien sirve como párroco de Santo Tomás Apóstol, pero que también acompaña a cuatro capillas más de esta zona de la ciudad.
De otra parte, en el barrio La Primavera, donde está ubicada la parroquia San Alberto Hurtado, se hizo entrega de otros cien mercados, que, junto al padre Ovidio Peñaranda y Monseñor José Libardo Garcés Monsalve, fueron puestos en manos de los beneficiarios, que agradecieron a la Diócesis de Cúcuta por tenerlos siempre presentes con estas ayudas, ya que no es la primera vez que llevan a sus hogares esperanza y caridad, por esto, siempre se han sentidos acompañados por la Iglesia, en medio de las necesidades que experimentan.
Con estas entregas, se cumple con el compromiso adquirido por parte de la Diócesis de Cúcuta, de distribuir los recursos de la Campaña de Comunicación Cristiana de Bienes, entre las personas más necesitadas del Anillo Vial Occidental, para que los bautizados que ofrendaron en el tiempo de Cuaresma, reciban abundantes bendiciones de Dios.