Lo extraño es que nunca han existido dichos aportes y preocupa que una Corte tan importante, que la han llamado el “techo jurídico de la Nación” debata, formule ponencia y falle en Sala Plena para eliminar un artículo, que ni en el presente ni en el pasado se ha cumplido. La Iglesia de Pamplona ignora por qué el autor de la Ley que declaró “Patrimonio Cultural de la Nación” la Semana Santa de Pamplona, incluyó un artículo referente a aportes que ni se han solicitado ni se han otorgado nunca.
Escribo este comentario porque algunas personas al enterarse de la prohibición de la Corte pueden estar pensando, que si tan elevado Tribunal se pronunció, fue para suprimir aportes, que tal vez serían cuantiosos, y no se imaginan que están suprimiendo algo inexistente.
Tiene razón el editorial al afirmar que cada religión debe financiar sus actos de culto y así ha ocurrido siempre en Pamplona.
Ayer, al producirse la noticia, supe; porque antes no lo sabía; que los Nazarenos, encargados de organizar las calles y cargar las imágenes durante toda la Semana Santa recibieron siete millones del Municipio. Como son 400 Nazarenos en Pamplona, me asusté porque creía que ese valor era para cada uno; pero no, es para todos, es decir $ 17.500 para cada uno; $2.500 diarios durante la Semana Santa, seguro para algún refrigerio por su valiosa tarea cívica y organizativa. Más cuesta una sesión de la Honorable Corte, con ponencia y todo, que el aporte recibido por ellos. Seguro que con el cariño que tiene Pamplona con sus Nazarenos, al menos con una rifa puedan suplir su refrigerio.
Pamplona, 7 de mayo de 2016
LUIS MADRID MERLANO
Arzobispo de Nueva Pamplona