Cantos marianos, globos, banderas, imágenes de la virgen, velas y flores blancas, acompañaron el peregrinar de cientos de cucuteños, provenientes de distintas comunidades parroquiales, movimientos apostólicos y grupos eclesiales, quienes honraron a la Madre del cielo, acogiéndose bajo su amparo y pidiéndole que “nos ayude a comunicar nuestra fe y ser testigos del Evangelio”.
Durante la celebración eucarística, con la que finalizó la peregrinación, el padre José Antonio Del Vecchio, enfatizó que “debemos ser agradecidos con Dios por el don esta mujer (la virgen María), madre ejemplar”.
La Virgen de Fátima es una advocación con que se venera en el catolicismo a la virgen María, madre de Jesús. La misma se originó en una serie de apariciones que tres niños pastores, Lucía dos Santos, Jacinta y Francisco, afirmaron haber tenido en Fátima entre el 13 de mayo y el 13 de octubre de 1917.