“Hoy, incluso, cuando el gobierno nacional o el mismo gobierno municipal, en oportunidades flaquea, usted y su Iglesia siempre están ahí. Nosotros como alcaldía hemos seguido dándole a estas personas la educación, la salud, el gobierno nacional los subsidios de arriendo, pero la presencia de la Iglesia durante los hechos y después de los hechos, ha sido magnifica; usted ha orientado a su cuerpo pastoral, a sus sacerdotes y ha demostrado una vez más por qué su santidad, el Papa decidió designarlo como obispo de nuestra querida ciudad”, señaló el Alcalde de Cúcuta, durante la entrega de la distinción, el 24 de diciembre, en la Catedral San José.
La condecoración Juana Rangel de Cuellar se creó para galardonar a servidores eminentes de la ciudad, en tres categorías, de mayor a menor: especial, primera y segunda. Esta distinción fue otorgada al obispo de Cúcuta mediante decreto N° 296 del 24 de diciembre de 2015.
“En uso de su discrecionalidad y recogiendo el sentimiento de gratitud de la ciudadanía cucuteña respecto del galardonado (Mons. Víctor Manuel Ochoa Cadavid) y sus servicios prestados a los connacionales entiende que es propicio imponerle la más alta distinción (…) Su invaluable valor ha sido de gran importancia para la reconstrucción de las familias que lo perdieron todo”.