Defendamos la vida humana
«Antes de haberte formado yo en el seno materno, te conocía, y antes que nacieses te tenía consagrado» (Jeremías 1, 5).
«Antes de haberte formado yo en el seno materno, te conocía, y antes que nacieses te tenía consagrado» (Jeremías 1, 5).
Estamos a las puertas de un momento muy importante en la vida de nuestra comunidad: Las elecciones a los cargos de las autoridades locales, aquellos que tienen la responsabilidad directa del entorno cercano a nuestras comunidades. Seremos llamados a expresar nuestra elección en los próximos días, y es necesario entrar a reflexionar sobre la gran responsabilidad que tenemos al escoger a quienes tienen que cuidar y gestionar los recursos de la comunidad.
Este año tenemos en nuestra Diócesis de Cúcuta un precioso lema ANUNCIAR A JESUCRISTO, que anima toda la acción pastoral y la tarea evangelizadora de nuestra Iglesia que trata de ponerse en plena sintonía con el Papa FRANCISCO, que nos invita a caminar en una ruta misionera en este año, en la celebración del centenario de la publicación de la Carta Apostólica Maximum Illud, del Papa Benedicto XV (30 noviembre 1919), que anima y fortalece el trabajo misionero “Ad gentes” (Para ir a las gentes).
“Al atardecer de la vida te examinarán del amor”, decía san Juan de la Cruz en uno de sus escritos, aludiendo al Evangelio de san Mateo en el que se nos advierte que el pan compartido, el techo ofrecido, el amor entregado, serán nuestra corona en la gloria y serán la expresión de nuestra fidelidad a la revelación amorosa de Dios, que nos pide encontrarlo también en el hermano que sufre y en el dolor humano que el mismo Jesús quiso compartir.
En Estos días todos sentimos profunda tristeza y estamos preocupados por el camino que algunos de los miembros de los hombres que hacían parte de las FARC han asumido, al tomar nuevamente la opción por las armas.
Los Obispos católicos que, por gracia de Dios y encargo de la Iglesia, acompañamos y cuidamos como pastores al pueblo de Dios que peregrina en Colombia, celebramos gozosos con todos nuestros hermanos el Bicentenario de nuestra Independencia.
En estos días el tema de la PAZ surge como algo natural en la reflexión y en la vida de todos los colombianos. Resurgen situaciones y hechos que nos hacen entrar nuevamente en este argumento de fundamental importancia para la nación. La PAZ es un bien que nos urge a todos los colombianos, creando espacios y situaciones concretas para la construcción de una vida digna y de condiciones óptimas para todos. La situación de nuestra región geográfica es compleja, experimentamos un deterioro progresivo en temas de violencia y atentados contra la vida humana, por ello pongo a ustedes, queridos lectores de LA VERDAD este tema.
Celebramos el pasado 9 de julio, los cien años de la Coronación Pontificia de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá, como Reina de Colombia, en momentos muy difíciles de la
En dos ocasiones, cada año, todos los Obispos de Colombia, de las distintas arquidiócesis y diócesis, así como de los Vicariatos Apostólicos, provenientes de todas las zonas de Colombia nos
La economía al servicio de la dignidad humana y del bien común Leer más »
La liturgia de la Iglesia nos propone en estos días dos solemnidades que tienen gran importancia para nuestra fe y que nos pueden ayudar a comprender mejor cuánto Dios quiere