«Los frutos del proceso sinodal iniciado son muchos, pero para que lleguen a plena maduración es necesario no tener prisa” Papa Francisco.
Hoy 4 de octubre desde la Plaza de san Pedro, en la fiesta de San Francisco de Asís se ha dado apertura la Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos. Dicho momento inició con la Santa Misa, la cual fue presidida por el Papa Francisco junto a los nuevos Cardenales creados en el Consistorio el pasado 30 de septiembre y el Colegio Cardenalicio.
Después de las distintas etapas vividas (etapa local/nacional, continental y universal), durante el presente mes, se celebrará en el Vaticano la XVI Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos en base al slogan de la “comunión, participación y misión”.
En la apertura de la primera congregación general, ha dicho el Papa que “no es un parlamento ni un encuentro entre amigos” y que el “El protagonista del Sínodo no somos nosotros, es el Espíritu Santo, y si dejamos paso al Espíritu Santo, el Sínodo irá bien.”
Durante cuatro semanas, lo participantes estarán reunidos en el Aula Pablo VI para dar prioridad a la escucha para poder comprender cuál la Iglesia que el Señor quiere y así desde cada uno de los ámbitos encontrar métodos para facilitar ese “caminar juntos”.
En esta ocasión participarán 363 miembros, con derecho al voto, de los cuales 85 son mujeres y 54 que por primera vez en la historia de los Sínodos podrán votar sobre lo que se hable en el encuentro vaticano. Son 20 los representantes de las Iglesias Orientales, 43 Obispos de África, 47 de América, 25 de Asia, 48 de Europa, 5 de Oceanía, 1 sin conferencia episcopal; 5 son los presidentes de la Reunión Internacional de Conferencias Episcopales, 20 jefes de los dicasterios de la Curia Romana, 50 miembros de nombramiento pontificio y 16 miembros del Consejo Ordinario del Sínodo. Además, hay 8 invitados especiales y son 75 los demás participantes, de los cuales 57 son expertos y facilitadores, y 12 delegados fraternos.
El Papa Francisco menciona que: «Los frutos del proceso sinodal iniciado son muchos, pero para que lleguen a plena maduración es necesario no tener prisa”. Con ello invita a tener serenidad frente a los procesos de reflexión, ya que son asuntos que afectan a toda la Iglesia. Y finaliza diciendo “Confío que esta decisión pueda favorecer la comprensión de la sinodalidad como dimensión constitutiva de la Iglesia, y ayudar a todos a vivirla en un camino de hermanos y hermanas que testimonian la alegría del Evangelio».
Esta Asamblea continuará el próximo año, para esta misma fecha y supone la tercera y última fase de un proceso que comenzó en 2021, donde el sumo Pontífice buscaba que toda la Iglesia reflexionara sobre el caminar juntos para escuchar al pueblo de Dios. Finalizando su intervención deja un mensaje para todos: “Estoy convencido de que, en una Iglesia sinodal, también el ejercicio del primado petrino podrá recibir mayor luz. El Papa no está, por sí mismo, por encima de la Iglesia; sino dentro de ella como bautizado entre los bautizados y dentro del Colegio episcopal como obispo entre los obispos, llamado a la vez –como Sucesor del apóstol Pedro– a guiar a la Iglesia de Roma”.