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Este 16 de julio, la Iglesia católica celebró la Fiesta a Nuestra Señora del Carmen, donde en Colombia es Patrona y Reina de las Fuerzas Armadas, la Policía Nacional, la Infantería de Marina, la Fuerza Aérea, el Cuerpo de Bomberos y de los Conductores.
En la ciudad de Cúcuta, desde temprano los conductores de servicio público, en su mayoría, participaron de diferentes caravanas por las vías de la ciudad, adornando sus vehículos con bombas, flores e imágenes de la Santísima Virgen.
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Por su parte, La Policía Metropolitana de San José de Cúcuta, inició el día con la Sagrada Eucaristía, ofreciéndole a la Madre de Dios el día a día de los integrantes de esta institución que prestan sus servicios bajo el precepto “Dios y Patria”.
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La empresa de transportes Trasan S.A también rindió homenaje a la Virgen del Carmen con una caravana en horas de la tarde por las principales calles de la ciudad, donde participaron las busetas, evidenciando su fervor por la patrona de los conductores.
Historia
Según la tradición, un 16 de julio de 1251, San Simón Stock, superior en ese entonces de los Carmelitas, se encontraba en profunda oración rogando por sus religiosos perseguidos cuando la Virgen se le apareció con el hábito de la Orden en la mano y le entregó el escapulario.
La Fiesta de Nuestra Señora del Carmen, es además, símbolo del encuentro entre la Antigua y la Nueva Alianza porque fue en el monte Carmelo (que en vocablo hebreo significa jardín) donde el profeta Elías defendió la fe del pueblo escogido contra los paganos.
Por el 1205 San Alberto, patriarca de Jerusalén, entregó a los eremitas del Carmelo una regla de vida, que fue aprobada por el Papa Honorio III en 1226. Ellos tenían la misión de vivir en la forma de Elías y de María Santísima, a quien veneraban como la Virgen del Carmen.
En el Siglo XIII, el Papa Inocencio IV concedió a los carmelitas el privilegio de ser incluidos entre las Órdenes mendicantes junto con los franciscanos y dominicos.
Los carmelitas han pasado por algunas reformas, siendo la más grande la que hicieran Santa Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz. A través de los siglos esta espiritualidad ha dado muchos santos a la Iglesia.