Fotos: Centro de Comunicaciones Diócesis de Cúcuta
En el segundo día de peregrinación por la Diócesis de Cúcuta, Nuestra Señora de Fátima de Portugal, estuvo en las horas de la mañana en el puente internacional Simón Bolívar, en el municipio de Villa del Rosario. En compañía de Monseñor Víctor Manuel Ochoa Cadavid, Obispo de esta Iglesia particular, se dio el encuentro con las personas que a diario cruzan la frontera.
Monseñor elevó una oración por el vecino país, pidió por la paz, la reconciliación y el bienestar para Venezuela.
Alrededor de las nueve de la mañana en la Casa de Paso ‘Divina Providencia’, llegó la Santísima Virgen, sorprendiendo a los más de 3.500 migrantes que a diario llegan allí a recibir alimento, atención médica y guía espiritual.
En la Casa de Paso se celebró la Sagrada Eucaristía, presidida por Monseñor Víctor. Fueron momentos de comunión con los hermanos venezolanos que manifestaron sentir la misericordia de Dios por la presencia de la Virgen y porque se les permite todos los días llegar hasta ese lugar a recibir un plato de comida.
La homilía de la Santa Misa estuvo a cargo del coordinador de la Casa de Paso, el padre David Caña Pérez, que expresó: “Tenemos la visita de la ‘llena de gracia’. Cuando nos dejamos visitar por la presencia del Espíritu Santo, nuestra vida empieza cambiar, ya no pensamos como piensa el mundo”. El padre David aseguró que en medio de las dificultades, Dios va a hacer la obra en cada uno, asimismo expresó, que tener la imagen de la Virgen en la Casa, es “contemplar la obra de Dios en una mujer y Dios quiere que nos dejemos tocar por él. Seamos instrumentos del Señor en este mundo”.