Foto: Centro de Comunicaciones Diócesis de Cúcuta
Después de vivir la experiencia del Triduo Pascual y de haber hecho un receso en las labores que se adelantan en la Casa de Paso Divina Providencia, se retomaron labores con el fin de seguir respondiendo al llamado de la caridad con los venezolanos que arriban a Colombia, exactamente al corregimiento de La Parada, Villa del Rosario, Norte de Santander, en busca de nuevas oportunidades, de comida, de medinas y de mejores condiciones.
Con la alegría del resucitado, las puertas de la casa se abrieron hoy ofreciendo desayuno a más de 1500 personas y se brindaron 1.200 almuerzos, completando la cantidad de 349.700 almuerzos entregados a la fecha.
“Reconocer a Jesús resucitado es entender y vivir la vida de forma diferente. Es vislumbrar al Resucitado que en medio de nuestros acontecimientos diarios impulsa todo lo que hace brotar la vida y libera a la humanidad de caer en las muertes cotidianas”, palabras mencionadas hoy durante la jornada, por el padre David Caña, coordinador de la Casa de Paso.