Foto: Centro de Comunicaciones Diócesis de Cúcuta
Ante la situación de crisis que vive el vecino país de Venezuela, la Diócesis de Cúcuta, acudió hace un año (14 de marzo de 2017) al corregimiento La Parada, Villa del Rosario, para preparar alimentos y así ayudar a los hermanos venezolanos.
El primer plato que se compartió en aquella ocasión fue el tradicional mute. Desde entonces comenzó una experiencia de Fe y caridad con los migrantes y necesitados que cruzan la frontera en búsqueda de mejores condiciones de vida.
Durante este tiempo la Diócesis de Cúcuta ha sido testigo de la caridad y la providencia Divina manifestada en la mano amiga y solidaria de personas capaces de compartir y servir al prójimo en tiempos difíciles, como lo son los movimientos apostólicos, sacerdotes, religiosas, diáconos, seminaristas y agentes de Pastoral de las Parroquias.
Esta experiencia que inició con una olla comunitaria, se ha consolidado en la Casa de Paso Divina Providencia, ubicada en la Parroquia San Pedro de La Parada, bajo la coordinación del padre José David Caña Pérez, donde hoy día se ofrecen diariamente agua, café, pan y alrededor de 1.500 almuerzos para niños, mujeres embarazadas y migrantes en condición de vulnerabilidad, alcanzando a la fecha un total de 337.400 almuerzos.
De igual manera, como fruto de esta iniciativa se abrieron en 10 Parroquias de las periferias de la ciudad las Ollas de Caridad, para asistir con alimento a las familias más necesitadas de estas comunidades.