Foto: fundacionmonseñorromero.org.sv
El papa Francisco ha firmado el decreto del milagro por intercesión del arzobispo de San Salvador Oscar Arnulfo Romero, asesinado el 24 de marzo 1980 por los ‘escuadrones de la muerte’ un grupo de extrema derecha de El Salvador, mientras celebraba la Misa en medio de una naciente guerra civil entre la guerrilla de izquierda y el gobierno dictatorial de derecha. Motivo por el que será proclamado santo; la beatificación de Mons. Romero se había proclamado ya con un decreto en el que se reconocía como un mártir por ser asesinado por “odio a la fe” y por tanto sin necesidad de un milagro.
Un mes antes de su asesinato, el arzobispo escribió al presidente Jimmy Carter, pidiendo que dejara de apoyar al gobierno salvadoreño e interrumpiera su suministro de armas y asesores militares. Y el día antes de su asesinato, instó a soldados y policías no seguir las órdenes de matar a civiles, y a que detuvieran la represión, alegando que las personas muertas eran sus hermanos de la patria.