Ante las crecientes tensiones en Medio Oriente y los conflictos que permean al mundo, el Papa Francisco ha convocado a una jornada de oración y ayuno por la paz el próximo 7 de octubre, coincidiendo con el primer aniversario del ataque de Hamás a Israel. Esta iniciativa busca unir a millones de fieles pidiendo a Dios Padre por el fin de la violencia y el sufrimiento que afecta a tantas naciones.
Un llamado urgente a la paz mundial
En su mensaje al finalizar la misa solemne en la Plaza de San Pedro, durante la apertura de la segunda sesión de la Asamblea General del Sínodo, el Pontífice invitó a los creyentes de todo el mundo a utilizar las «armas» espirituales de la Iglesia: la oración y el ayuno. Este gesto, explicó, tiene como fin implorar el don de la paz en un mundo sacudido por la guerra, especialmente en Ucrania, Oriente Medio y África.
Una visita especial a Santa María la Mayor
Además, el Papa anunció una visita a la Basílica de Santa María la Mayor el 6 de octubre, un día antes de la jornada de oración, para rezar el Rosario y pedir la intercesión de la Virgen María por la paz. En este encuentro espiritual, el Papa Francisco ha solicitado la participación activa de todos los miembros del Sínodo, reafirmando la importancia de la unidad en la búsqueda de soluciones pacíficas.
“Para invocar de la intercesión de la Bienaventurada Virgen María el don de la paz, el próximo domingo iré a la Basílica de Santa María la Mayor donde rezaré el Santo Rosario y dirigiré una sentida súplica a la Virgen María”, señaló el Papa.
Esta no es la primera vez que el Papa Francisco hace un llamado a la oración y el ayuno en momentos de crisis. A lo largo de su pontificado, ha convocado a jornadas similares en contextos de conflicto como en Siria, Líbano, Afganistán y Ucrania, haciendo un llamado a la fe y a la acción espiritual como medios para enfrentar la violencia y promover la reconciliación.