Tras un encuentro del obispo de Cúcuta, Monseñor Julio César Vidal Ortiz, con 25 comerciantes de la ciudad, el 10 de abril, se planteó el propósito de abrir nuevos caminos de solución a la crisis económica, desde la compañía y colaboración de la Iglesia.
Monseñor Vidal, expresó que partiendo de la explicación dada por los líderes comerciantes, se percibe a primera vista la falta de unidad, de acompañamiento permanente de diferentes entidades como la Cámara de Comercio, Fenalco, falta de promoción del producto local para otros mercados donde se puede encontrar oportunidad de negocio.
Por otra parte, habló de la posibilidad de abrirse al mercado, a través de ferias empresariales para variados sectores que promuevan los productos en la ciudad al interior del país, en las que tengan asiento también pequeños comerciantes, y de reorganizarse en diferentes gremios, junto con entidades y el gobierno para así llegar a mejores soluciones.
A su turno, el padre David Cañas, delegado de la Pastoral de Comercio, explicó que a través de esta reunión y las siguientes que planean, se busca que los comerciantes sientan la presencia de la Iglesia y “crear una nueva ruta para una unidad y tener así unos canales de comunicación entre la Iglesia, el comercio, la alcaldía y la gobernación a través del acompañamiento.
Durante el encuentro los líderes comerciantes expusieron la problemática económica que se presentan: desunión, poco orden en los precios, dependencia de los venezolanos, desorganización, poca o nula industria en la ciudad, desvalorización del producto a través de la guerra del precio, entre otros.